Por: Diego De La Rosa
El pasado 8 de marzo, en el marco de la Conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la ONU Mujeres hizo una invitación a través de las redes sociales a la sociedad colombiana para trabajar en pro de la equidad de género como factor diferencial en búsqueda de un futuro más justo y equilibrado.
Esto se debe a una serie de estadísticas que se tornan preocupantes para las mujeres y las disidencias de género femenino en términos de igualdad laboral en el país. De acuerdo con estas cifras, en Colombia, una mujer puede ganar hasta un 36% menos de salario que un hombre en labores similares.
Este tipo de tendencias se pueden evidenciar en los distintos gremios e industrias a nivel nacional, y la música no es la excepción para este tipo de situaciones.
En el caso de los géneros urbanos o las sub culturas que surgen alrededor de la juventud, las expresiones machistas y la discriminación se pueden reflejar en el diario vivir; no obstante, aparecen varias historias inspiradoras que comienzan a labrar caminos para que las mujeres equiparen sus oportunidades y derechos como corresponde.
Un ejemplo de lo anterior, son Las Poker, una banda de metal surgida entre los estudios de ensayo de Bogotá y compuesta por 3 mujeres de chamarra negra y amantes del ‘pogo’, los guturales y el buen metal.
La banda está conformada por Laura Angulo “Laurer” a cargo de la voz y la guitarra, Paola Rodríguez “Polita” en el bajo y Luz Silva “Lucky”, sentada en la batería; juntas buscan seguir revolucionando la industria del metal y posicionando a las mujeres en ella.
Tribuna Cultural tuvo una entrevista exclusiva con las integrantes de la banda y nos solucionaron algunas dudas sobre su recorrido, la industria, la equidad de género y los nuevos proyectos musicales que vienen para ellas.
Tribuna Cultural: ¿Cómo nacen Las Poker y cuántos años llevan tocando?
Las Poker: esta banda nace en una sala de ensayo donde, por coincidencia, llegamos las 3 a ver ensayar unos amigos. Allí hubo una conexión instantánea entre nosotras, como una química común entre todas que nos llevó a formar una banda musical. Desde ese día llevamos 12 años, más o menos desde 2009 y ha sido una experiencia increíble.
TC: ¿Cómo ha sido el camino en la industria del metal?
LP: el camino ha sido muy difícil y retador, pero ha estado cargado de experiencia, de emociones, de alegrías, de retos y siento que ha sido demasiado grato para cada una de nosotras estar ahí presentes haciendo parte de esta historia. Creo que el máximo logro viene de que nuestro aprendizaje fue empírico; sin embargo, aprendimos mucho sobre la música y logramos crecer como artistas y como banda. Hoy en día disfrutamos esta experiencia.
TC: ¿Han tenido dificultades por ser mujeres o algún tipo de discriminación en la industria?
LP: sí, sentimos que se presentaron en nuestros inicios, debido a que todavía había un público muy reacio y escéptico al hecho de que las mujeres hiciéramos música pesada; sin embargo, todo es cuestión de tiempo, avance y adaptación. El progreso es inevitable y a lo largo de nuestro recorrido involucraron muchas personas que nos apoyaron y eso nos hizo más fuertes, nos hizo creer en nuestro sueño. Hoy en día siento que el movimiento femenino en el metal es mucho más fuerte y tiene un lugar más importante y sentimos un gran privilegio por hacer parte de este gremio y de esta revolución ya que hoy en día podemos ver bandas de mujeres con potencial y talento increíble.
TC: ¿Cómo aporta esta banda a la lucha y equidad de género en la sociedad colombiana?
LP: nuestro aporte es muy básico, consta en seguir haciendo música, creando nuestras letras, siendo coherentes con el proceso que llevamos, inspirando a otras personas y otras generaciones para que esta vuelta siga creciendo, que haya más mujeres en esta movida. No sólo es un tema de género, es un tema de equidad e igualdad, de entender que esto no va a crecer si nos vemos como competencia, sino que tenemos que unirnos y generar alianzas para apoyar las bandas que llevan años trabajando y aquellas que emergen. Hay que comprender que en Colombia hay una escena muy grande y valiosa en el metal y saber que, cuando entendamos esto, podremos evolucionar para seguir dando todo en el escenario en pro del público.
TC: ¿Creen que hay cada vez más caminos y oportunidades para las mujeres en la música?
LP: siento que sí, cada vez tenemos muchas más oportunidades. Las bandas femeninas han tenido mucho crecimiento y cada vez somos más las mujeres que podemos pararnos duro en la tarima para hacer buen rock y metal. La escena metalera era muy machista hace unos años, lo cual hizo más difícil el camino; sin embargo, tuvimos que mantenernos fuertes y poco a poco ha cambiado ese ideal discriminatorio dentro del género y se han comenzado a abrir más caminos y senderos para las bandas de las mujeres que sueñan con hacer rock pesado.
TC: ¿Cómo potenciar la industria del metal en el país?
LP: potenciar la industria en Colombia siempre ha sido muy difícil, y en parte por culpa de nosotros, ya que no comprendemos que es necesario unirnos entre bandas locales y apoyarnos para la planeación de viajes para que nos conozcan a nivel nacional e internacional, en festivales, eventos y escenarios. Falta mucha hermandad y comunidad en la cultura metalera, si nos apoyáramos más, las bandas de acá podríamos crecer el triple, puesto que la industria lleva años estancada en un punto donde no sube ni baja, en un limbo debido a las adversidades y a la falta de cooperación. Es obvio también, que faltan espacios para que las bandas emergentes puedan darse a conocer, acá apoyamos mucho a las bandas extranjeras, pero poco a las de nuestra tierra, a pesar de que Bogotá es muy grande, faltan espacios para hacer metal.
TC: ¿Cómo sobrevivieron a la pandemia y sus restricciones?
LP: Las Poker sobrevivimos a la pandemia ensayando, nunca dejamos de lado nuestro proyecto y cada vez que podíamos nos veíamos y tocábamos nuestras canciones. También tuvimos un tiempo dedicado a componer, entonces todas nos pusimos a pensar ideas para nuevas canciones y luego compartimos todas estas ideas. Realizamos muchos streaming y jamás dejamos de pensar en hacer música y potenciarnos por medio de las redes sociales. Como lo importante en la historia de esta banda, ¡ACÁ LO IMPORTANTE ES QUE SOBREVIVIMOS!
TC: ¿Cuál es su estrategia en tiempos de reactivación económica?
LP: como banda nunca dejamos de estar activas ya que durante pandemia intentamos generar expectativas y movimientos a partir de las redes sociales. Logramos ponernos las pilas con las plataformas digitales. Luego de eso preparamos unos shows cuando se comenzaron a activar los conciertos y se generaron las oportunidades. Es muy importante el manejo publicitario para los eventos y los nuevos proyectos que vienen, ahora que podemos volver a pensar la sociedad más normal y los eventos de manera más masiva, para nosotras es importante mostrar el trabajo realizado y los aprendizajes de estos años.
TC: ¿Cuáles son los proyectos que vienen en el camino?
LP: en cuanto a los proyectos, el primero y principal es el lanzamiento de nuestro nuevo disco, compuesto de 8 canciones y que se encuentra en etapa de post producción para ser lanzado al público. Estamos en proyección de poner a girar ese disco, buscando de pronto un festival importante en otro país para darnos a conocer y generar un impacto nacional e internacional, los invitamos a ver nuestras redes sociales, allí estaremos dando más información al respecto.
Foto por: PHOTOURBAN
Esta historia es una bocanada de aire en el marco de una crisis humanitaria mundial a causa de la pandemia que, hasta ahora, comienza a dar esperanza de una recuperación.
De acuerdo con Naciones Unidas Colombia, la pandemia amplió la brecha de desigualdad entre géneros para el año 2021, agudizando así la crisis que viven las mujeres y las disidencias de género en búsqueda de equidad.
“Según las nuevas proyecciones globales de esa agencia de la ONU, en 2021 sólo el 43,2% de las mujeres en edad de trabajar tendrá un empleo, en tanto que el 68,6% de los hombres estará trabajando, un nivel que recupera el índice de ocupación masculina previo a la emergencia sanitaria”.
En el marco de esas declaraciones y las proyecciones preocupantes para las mujeres, el empuje, la organización y la resistencia de Las Poker puede ser una inspiración y ejemplo para el resto de industrias.
En primer lugar, las mujeres pueden notar que es posible por medio del esfuerzo, la unión y la cooperación salir adelante en el metal o cualquiera de los géneros musicales que las inspire.
En segunda medida, un ejemplo para el género masculino que, por momentos, discrimina y menosprecia los actos de la mujer y que resta valor a los esfuerzos de un grupo que sólo busca equidad y un reconocimiento justo ante el mundo.
Por último, un aprendizaje general para el pueblo colombiano ya que, por medio de estos esfuerzos que van creciendo desde los estudios y las pequeñas tarimas hacia los grandes escenarios, se van abriendo espacios, motivaciones y revoluciones para las mujeres que se sienten marginadas y que buscan un respiro y una esperanza para seguir luchando por un mundo más equitativo.
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